viernes, marzo 21, 2014

Iglesia y educación en Venezuela

La educación debe ser igual pero separada (una frase poco popular, pero muy cierta). Los hijos de familias pudientes, llamados a ir a las universidades y, más tarde, tomar las riendas de empresas, negocios, ejercer profesiones libres y ocupar los cargos más altos dela administración pública, deben ser educados para alcanzar estos fines y asumir responsabilidad social de la forma más responsable y cristiana. Los niños que, por su origen socioeconómico, tienen desventajas, deben ser educados en el respeto a la autoridad, en la diligencia, en la modestia y, sobre todo en el mensaje cristiano del amor.

La Iglesia Católica debe oponerse a todo intento de homogenizar la educación básica, porque esto sólo nos llevará al caos y a las guerras entre hermanos. Los niños de los estratos más pobres querrán acceder a las mismas posiciones de sus compañeros más afortunados creándose inconformidad y alimentándose la envidia. Los de los estratos superiores perderán motivación para estudiar y alcanzar el éxito. Con una educación talla única, lo que crearemos en una nación de envidiosos y conformistas.
Jorge Urosa Sabino, Arzobispo de Caracas
10.09.09

Más educación no es mejor porque intelectuales formados por el sistema educativo tienen tendencias de izquierda y rechazan el mercado. (Alfredo Bullard, editorialista de El Comercio, en CADE de la Educación, mayo 2013)

Un error en el envío de sus comunicaciones, según el mismo reconoce en otra nota, permitió que se conociera el texto del arzobispo caraqueño del que hemos extraído dos párrafos reveladores sobre uno de los principales aspectos de la actual crisis venezolana: la expansión y calificación educativa de la juventud y la niñez pobre dando paso a una nación de “envidiosos”, es decir personas conscientes de su condición dominada y explotada, y de ningún modo conformistas. A lo que el “liberal” Bullard le añade su conclusión de que “más educación” aumenta los intelectuales de izquierda que rechazan el mercado, o sea que a menos educación mayor mercado y felicidad para todos.

El arzobispo tiene muy claro como es la cosa: las universidades para las familias pudientes, de donde proceden las personas de negocios, los profesionales libres y los más altos cargos del Estado. Para eso están destinados. Y los más pobres y desafortunados que aprendan a respetar, a ser modestos, diligentes y amorosos de lo poco que les ha dado la vida. Quién piensa así, es obvio que interprete la revolución chavista como una locura. Darle poder, profesionalidad y ganas de ser mejores a la mayoría que nació con desventajas, es una amenaza terrible.

Miren ustedes que en Chile, Colombia y otras partes los jóvenes luchan por una educación de calidad, gratuita y de acceso para las mayorías. Y les dan pretextos presupuestarios para demorar la reforma. Pero en Venezuela está clarísimo que el enorme avance educativo ha ayudado a sacar a los privilegiados a las calles y espantado a la iglesia conservadora.

21.03.14

3 comentarios:

Juan A. Cavero G. dijo...

Pocas veces el pensamiento fascista ha sido expuesto con tanta nitidez, como lo hacen Bullard y el arzobispo caraqueño. Bobadilla y Cipriani no habrían sido más elocuentes.

Juan A. Cavero G. dijo...

El incendio de la UNEFA, universidad pública en San Cristóbal del Táchira, hace unos días, es una prueba más de la ideología fascista que impera en las filas de la oposición venezolana. Es la puesta en acción de las concepciones reaccionarias de Urosa, Bullard, Cipriani, Bobadilla y sujetos similares. Por supuesto que el atentado terrorista no merecerá ninguna difusión por parte de la CNN, El País y el resto de la escoria mediática internacional.

Anónimo dijo...

¡Bravo, Wiener! Pero te faltó mencionar la joyita del Ministro de Educación de Venezuela, Héctor Rodríguez: "No es que vamos a sacarlos de la pobreza para llevarlos a la clase media y que se vuelvan escuálidos (opositores)". O sea, Wiener, que para tí los estudiantes de clase media y popular que el gobierno madurista masacra en las calles y en las universidades (y luego echa la culpa a los propios estudiantes de pirómanos) serían, según tu análisis forzado, unos envidiosos? ¿Contra quién? Si es contra los que están en el poder, o sea, contra el petro-chavismo de mierda, en buena hora. Si es contra la burguesía que pretende hacerse con la lucha, en buena hora también. O tal vez pienses, Wiener, que los chicos que no se cansan de salir a la calle a enfrentar al bolivarianismo armado, son los burgueses. Pero entonces no son conformistas, como pretendía el cura mafioso del que nos hablas. Entonces, una vez más, ¡en buena hora!
Una cosa que tienen que saber tú y tus lectores idiotas, Wiener, es que la fiscal de Venezuela, adepta al régimen, ha estado obligada en los últimos días a meter preso a un policía que, acompañado de bolivarianitos armados, se ganó la lotería al ser filmado por una cámara encastrada en los locales de una universidad en lucha, masacrando a un estudiante y aterrorizando a varios otros que tuvieron que encerrarse en un auditorio para que no les pase lo que a muchos les está pasando en ese país donde una dictadura social-fascista gobierna: las detenciones abusivas, la tortura o la muerte.
Chau, Wiener.