Tenía la idea de que
el actual director de El Comercio era insuperable en el arte de la superchería
(dar explicaciones falsas y sin fundamento racional sobre los hechos, digamos,
políticos, para que la gente se distraiga de lo importante) y que era mal copiado
por su discípulo y sucesor en la conducción de Perú 21 que ha sido marcado por
Hildebrandt con el mote de “el filósofo”, es decir el que quiere hacer
importantes las cosas más banales.
Pero, no me había
percatado lo suficiente de que en las mismas páginas del diario político menor
de la gran familia, había un farsante aún más audaz que entre sus atrevimientos
está el de ser un boliviano que escribe desde Nueva York sobre el Perú para los
peruanos, y todo para contarnos que los chavismos perversos de este mundo
comienzan cuando los cubanos empiezan a llegar.
Según dice, él fue el
que lo dijo en el 2005 en Bolivia, cuando Evo acababa de ganar las elecciones
en primera vuelta (que es lo que lo ha hecho emigrar), y lo que parece que
nadie se dio cuenta en Venezuela hasta la crisis actual, en las que las derecha
piden a gritos que los Estados Unidos y la OEA los salven del imperio de la
isla, agregando como si fuera obvio que el mismo proceso también pasa en
Ecuador y Argentina. Claro, si estos países han apoyado a Maduro se deduce que
están copados por los cubanos.
Pero lo mejor del
razonamiento es que la definición de que la clave de la cubanización está en la
duración. Y en el Perú se ve que a falta de una constitución para
reelegirse, la variante que se está insinuando es la de tipo Cristina Kirchner,
es decir de la esposa del presidente que se vuelve candidata. Y si algo de esto
llega a suceder, ahí sí se nos vienen los cubanos, con sus inofensivos mandiles
de médicos a imponernos su modelo.
Y el idiota que
escribe esto, que tiene por nombre Juan Claudio Lechín, lo hace en
plena polémica sobre el salario mínimo que la pareja presidencial no quiere
aumentar para darle gusto a su ministro de Economía y a la gran empresa
cacheteando a los trabajadores, y en momentos en que la p rimera dama peruana
aparece como el ariete de una tecnocracia fondomonetarista que acaba de tomar
el premierato luego de un largo proceso de copamiento y que goza ahora de un
inmenso poder.
Pero Lechín, como Du
Bois y Garrido, dicen que todavía hay un riesgo de chavismo y cubanización en
el Perú de Castilla, Cornejo y Nadine, que no estamos viendo y que es contra lo
que hay que pelear. ¿No se dan cuenta de lo que demora sacarle a Humala un
comunicado contra Maduro? Seguro que los cubanos llegan después del 2016.
www.rwiener.blogspot.com
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