Los que fueron a sacarle una retractación
a “Brasil”, han debido tomar en cuenta, más que la importancia de los temas de
sus declaraciones iniciales, la fuerza que tenía que un tipo beneficiado por
las gracias de AGP se autoinculpara y colocase la historia de los narcoindultos
y narcoconmutaciones bajo la idea de un gran negociado de dinero con la
libertad de los presos pudientes, sin considerar la gravedad de los delitos y
la posibilidad de reincidencia, como la que se ha visto hace unos días con el
colombiano que llevaba 4 toneladas de cocaína.
Carlos Butrón Dos Santos (“Brasil”), se
refiere a la participación de Facundo Chinguel, exjefe de la Comisión de
Gracias, y de su personal operativo, casi todos ellos apristas. Añade que sabía
que Facundo coordinaba con el secretario de Palacio y nada más. Es decir, se da
el lugar de nexo con los prisioneros a los que iba a ofrecerles libertad a
cambio de dinero. Antes que “Brasil”
entrara en escena, AGP había dicho que Facundo era un hombre probo, un aprista
de los viejos tiempos, que chambeaba duro por pocos ingresos; pero después el
expresidente pidió anular sus declaraciones y dejó al hombre probo a su suerte
y un juez le dictó prisión preventiva.
Entonces: ¿qué están buscando con la
retractación? Seguramente lo primero es voltear la denuncia contra la
Megacomisión, como si ella fuese la inventora de las declaraciones de “Brasil”.
Lo segundo, aislar a Sergio Tejada de los otros comisionados, afirmando que se
reunió en privado con el expresidiario que vino en su busca, sin que lo
supieran los fujimoristas y el saltimbanqui Enrique Wong. Lo tercero, sugerir
que no hay pruebas de los pagos (aún cuando hay otros testigos de lo mismo),
por tanto no hubo corrupción ni en García ni en Facundo.
Pero, mientras el texto último leído por
Butrón son sólo palabras que favorecen a la parte que antes atacaba, las declaraciones iniciales contienen
elementos que son susceptibles de verificación: (1) indica de manera directa
como ejemplo de que se maquillaban los expedientes, que uno de los “nigerianos”
recibió una conmutación de pena, ocultando su pertenencia a una banda y
apuntando que era un buen padre que quería volver con su hijo. Esto se puede
demostrar viendo los documentos y de paso estudiar otros casos; (2) asegura que
visitó el ministerio de Justicia hasta en 14 oportunidades entre las 10 pm y
las 3 am, lo que debe figurar en los registros y que comprueba el trabajo
encubierto que realizaba; (3) que estuvo en el mismo hotel con Facundo en Piura,
para una entrega de dinero, cuando ambos residían en Lima, y Facundo Chingel
anotó los nombres de ambos de su puño y letra en el libro del Hotel El Sol.
Si todo esto es verdad, ¿con cuál de las
versiones de “Brasil”, usted se queda?
24.10.13
www.rwiener.blogspot.com
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