La crisis y el reacomodo que se viene

Ya se ha hecho una costumbre que los dos tabloides políticos de la gran concentración coincidan casi al milímetro en sus carátulas, como volvió a ocurrir el jueves con la renuncia de Dacia Escalante, para no hablar de lo parecido que puede ser el tratamiento de las noticias y la falta de ideas en las columnas de sus directores, que debe ser la forma como se demuestra la independencia editorial del grupo Agois.

Pero ayer, Perú21 quería convencernos que la principal noticia era una estafa bancaria y Correo que a Toledo otra vez le está llegando la “hora final”. En la propia nave nodriza del conglomerado periodístico la primera plana es “Justicia no quiere interferencia en caso sobre medios”. Los periodistas sabemos en que hay días en que se puede discutir la noticia más importante. Tal vez este haya sido uno de esos. Pero, no sé por qué, me tinca que lo que han querido bajar es la noticia de la semirectificación de los tres del Tribunal Constitucional en el tema del nombramiento/destitución de  los fiscales supremos.

Después de todo, la posición de “los comercios”, sobre el caballazo del TC, era que todo esto había sido así porque no se les había dado la razón en su campaña para que Ramos no sea Fiscal de la Nación y los sustituya Pablo Sánchez, su nuevo favorito. La resolución original de los tres del TC, aceleraba una crisis que era como la última oportunidad para ganar 100% la partida. Por eso, como dice Uceda, con sus excesos, el TC estaba abriendo la posibilidad para reorganizar el CNM y el Ministerio Público, sin importar mucho la catadura de Mateo Castañeda.

Ahora estamos ante que el TC ha dado medio paso atrás, reponiendo a las fiscales que había destituido, y cambiando el estatus de Castañeda al de reserva para que junto con su carnal Hinostroza, se conviertan en fiscales supremos apenas haya vacantes. Pero eso significa que el asunto Ramos ya perdió impulso. Entonces, se comprende que la gran concentración esté empezando a reconsiderar sus puntos de vista. Por el momento eso se refleja en el intento de salirse del gran tema de la crisis institucional para colocarlo en un segundo plano. Pero si se observa bien se puede tomar la entrevista que precisamente ayer dedican en la segunda página de su diario emblemático al recontra cuestionado Carlos Ramos, como una señal de que un Plan B está entrando en funcionamiento.

Esto hace recordar el apocalipsis que se anunciaba con la posibilidad de la elección de Humala, que justificaba cualquier exceso de sus adversarios (el programa de Bayly, por ejemplo), y que luego se trocó en una etapa de acercamiento con el nuevo poder, que decían que no era lo que ellos mismos habían dicho. Para que ahora, cuando lo tienen en sus manos, lo traten como un trapo viejo. ¿Estarán pensando hacer lo mismo con Carlos Ramos?

10.05.14

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