sábado, diciembre 29, 2012

Tiempos de balance


Como muchos de mis lectores lo saben este año me tocó difícil. Luego de varios meses en que intenté ignorar que estaba enfermo y me empeñé en mantener una participación periodística diaria en la prensa escrita y complementarla con artículos de investigación, y al mismo tiempo ser parte de un equipo que producía un programa por televisión todas las noches, que se cerró al comenzar el mes de junio, ingresé a un período en el que ya casi no podía con mi cuerpo y empecé a pasar de médico en médico sin que nadie pudiera decir que era lo que explicaba esa extraña combinación entre una tos implacable y un sangrado de los riñones que no parecían tener conexión.

Entre el 23 de julio y el 7 de agosto (15 días)  estuve internado en el Hospital Rebagliati detrás de un diagnóstico que finalmente me llegó cuando ya tenía la certeza y resignación suficiente para admitir que estaba en el cuadro más grave de mi vida y que iba a luchar cuesta arriba para salvarme. El día 10 de agosto fui operado y sufrí una extracción amplia y profunda que no se la desearía a nadie, pero que era inevitable para eliminar el foco central del mal. Pero ahí no iba a acabar la cosa: el cáncer originado en las vías urinarias altas y que me destruyó el riñón izquierdo también se extendió a otras partes de mi cuerpo y tuvimos que combatirlo con una quimioterapia intensa que felizmente mi cuerpo soportó sin doblegarse.

Actualmente la enfermedad ha retrocedido significativamente y he superado la fase de mayor debilidad. El pronóstico es bueno y según mi médico he superado las expectativas iniciales de recuperación. A estas alturas me siento cerca de una victoria que tiene mucho de personal por las ganas que le puse a salir adelante, pero que indudablemente se debe a la profesionalidad y humanidad de los médicos que me trataron en Essalud hasta operación y de los que lo hicieron en forma privada pero solidaria en Oncosalud. Por cierto a todos mis seres queridos, familiares y amigos que me hicieron sentir necesario en este mundo.

Antes de escribir estas notas miraba mi blog (www.rwiener.blospot.com) y sumaba que a tres días del fin del año he podido escribir 357 columnas durante 2012, muy cerca de un promedio de una por día. En el 2011, en plena campaña electoral  redacté 244 y en el 2010 llegué a 170.  Tengo columnas del día de operación, preparada un día antes y otra que hice para el día siguiente, otras columnas durante la quimioterapia de seis horas a la que fui sometido. Creo que nunca podré superar el récord de este año que me lo impuse como una manera de afirmarme de que estaba vivo que quiere decir que sigo siendo productivo.

La mejor lección que he aprendido del 2012 es a no darse por vencido. No se olviden que yo tuve otro cáncer en el 2005 y que esta vez me atacó una versión del mal muy poco difundida y por tanto con menor conocimiento de la ciencia. No niego que he tenido horas de incertidumbre y noches en las que me era difícil conciliar el sueño. Y es que enfrentar el cáncer no es cosa de superhombres, basta con la fuerza que tenemos en el cuerpo y el cariño de los demás para tener el soporte necesario para la acción médica.  Mi complejo año 2012 queda atrás.

29.12.12
www.rwiener.blogspot.com     

3 comentarios:

Luis Miguel Anamaria Chavarria dijo...

Estimado Raul Wiener, en primer lugar para saludarlo, yo soy la persona que lo abordo en oncosalud. Le exprese que me habían operado de un cáncer al colon.

También este año que termina ha sido muy complicado para mi persona. Pero también han sido positivos nació mi cuarta nieta, y he sabido quienes están con uno cuando ocurren situaciones parecidas, compañeros de trabajo cualquiera su linea política, algunos familiares, amigos de toda la vida, miembros del grupo CAPULI VALLEJO Y SU TIERRA, antiguos compañeros de UCET de la UNI,

Por recomendación de doctor Dario Maguiña hermano de una querida compañera de lucha en la UNI me recomendo al Dr. Luis Poggi, me operaron con laparoscopica. Segun me expresan tengo buen pronostico.

Deseando lo mejor usted y a su querida familia.

Un gran abrazo

LUIS ANAMARIA CHAVARRIA
BLOG SOCIALISMO PERUANO AMAUTA

No hay paz sin justicia social dijo...

Saludo fraterno y solidario Raúl, siempre eres ejemplo de lucha y consecuencia!

Kris dijo...

Continúe adelante, todo mi respeto.