lunes, junio 02, 2014

Indignos de ser aliados

He podido apreciar que está en desarrollo una corriente de compañeros de izquierda que reclaman contra la idea de una coalición democrática amplia para las elecciones municipales de Lima, porque algunos de los partidos que podrían formar parte de ella serían “indignos” para ser considerados en alguna alianza.

Hace poco más de un año funcionó un frente de lucha contra la revocatoria con una amplitud incluso mayor a la que ahora se está planteando, y nadie hizo ascos a caminar con el partido de Ecoteva o el de la abogada de Cataño, si se trataba de derrotar la operación mafiosa de Castañeda-García-Fujimori, para descabezar la alcaldía metropolitana y echar a Susana Villarán y a la izquierda del gobierno de Lima.

Alguien dirá, seguramente, que entonces se trataba de decirle No a la derecha más reaccionaria y ahora de formar un  nuevo gobierno. Pero no hay que exagerar. El mismo No de marzo de 2013, es el que hay que aplicarle al intento de regreso del mudo y la gran corrupción que representa, que sería además un hito clave para que la DBA monopolice el poder a partir del 2016.   

Y si en la revocatoria el tema era que Lima no debía parar, en esta elección es cómo evitar que retroceda. Y es verdad que Susana no puede ganar sino como continuidad del movimiento democrático contra las mafias y la corrupción, es decir no puede hacerlo solo como candidata de una plataforma tan estrecha como la que puede ofrecerle la izquierda.

Más aún, leo que a partir del debate sobre la “dignidad”, aparecen los que dicen que entre los actuales miembros del Frente Amplio también hay algunos que son indignos y que mejor solos que mal acompañados. Y empiezan a recordar peleas en el SUTEP, la CGTP; la FEP y otros espacios en los que la izquierda se sacó los ojos por problemas de dirigencia.

Y, claro, lo que se me viene a la cabeza son las “dignas” divisiones de 1980, 1990 y 2006, que construyeron paso a paso la izquierda marginal que ahora tenemos ante nuestros ojos. Y, otra vez, la pregunta vuelve a ser si queremos realmente salir de la situación de eternos criticones y entrar a una disputa franca por el poder. La izquierda tiene un capital, de los pocos que tiene, en la presencia de Susana y en la reforma urbana y social que representa.

Nuestra responsabilidad es agrandar el espacio de esta propuesta, no achicarlo para sentirnos purificados. Y sobre lo que cada quién tiene que responder ante la Justicia y la Historia, dejemos al tiempo hacer su trabajo. Si hay sectores que en este momento están dispuestos a apoyar a Susana y actuar junto con la izquierda, no los expulsemos.

Porque al final, lo más indigno es no aprender de la propia experiencia y volver a armar estrategias destinadas a perder. 

02.06.14

9 comentarios:

Anónimo dijo...

Nada de "anónimo", soy Ambrosio

Vamos Raúl, Susana no puede ganar porque es una incapaz, y está rodeada de ignorantes, algunos corruptos hasta la médula, más mafiosos que las "mafias" que dicen combatir.

Por más que el "villaranismo" se disfrace de demócrata, no lo es. Quizá Susana es una socialdemócrata, el resto no lo es. Es igual que tú, Raúl Tú no eres un demócrata, tu modelo país es Cuba o la URRS.

La Izquierda se saca los ojos en laSUTEP, la CGTP; la FEP por poder y dinero. Muestran lo incapaces, antidemocráticos e inmaduros, además de corruptos que son.

Martin Morales del Callao dijo...

Ese AMBROSIO debe ser el del viejo cuento de la CARABINA DE AMRBROSIO, mas retogrado y reaccionario no puede ser.
TODOS NO ESTAREMOS DE ACUERDO, PERO LA UNIDAD Y EL AVANCE DE LAS FUERZAS DEMOCRATICAS, PROGRESISTAS Y SOCIALISTAS DEL PERU DEBEN SEGUIR con fuerza tal que opiniones y pareceres del tipo q antecede sean arrastradas por la corriente de avance. No debemos perder el espacio ganado con Susana y permitir el regreso de la Mafia de Castañeda y sus secuaces.!!!

JORGE MILLONES dijo...

Los ejercicios contrafacticos son más literatura que análisis histórico.
Me parece que el ejemplo de la revocatoria no se aplica a esta nueva situación. Muchas cosas han cambiado no sólo en la correlación, sino en la percepción de la gente respecto a PP. Yo creo que es respetable la opinión de los que piensan que la alianza electoral con PP abre posibilidades de triunfo a Villarán, pero opino todo lo contrario y como tema colateral, para quien esto pueda interesar, deja a la izquierda muy mal parada sin ninguna capacidad de maniobra frete a lo que seguramente pedirá PP a cambio. Y siendo pragmáticos, yo no creo que PP se abra a una alianza semejante sólo para salvar la democracia de la corrupción aprocastañedista... El punto no es quién es más digno y quién menos digno, ni de fabricar un monigote moral para darle duro en aras del pragmatismo, sino, reconocer qué implica esto de cara al 2016, cómo queda el FA, qué significa "seguir con los avances de la transformación de Lima" y temas que la izquierda ha ido discutiendo desde la conformación del FA y no creo que a PP le interese mucho eso. Lo que es innegable, es que cuando empiece la moledora de carne mediática de la derecha, en el imaginario de los votantes, muy pocos creerán que Villarán hizo una gestión honesta o digna (curiosamente ambos son preceptos morales) que ahora es su distintivo frente a Castañeda. No sólo se abre un flanco, se cierran muchas posibilidades...

Huacapu dijo...

Estimado Raúl.
me parece que olvidas que en el Frente Amplio no existió ninguna reunión para consultara a las base sobre la táctica electoral. Peor aún, de levantar una candidatura natural,si las elecciones internas.

Unknown dijo...

Lo que indigna es que se ponga directamente a Susana Villarán como punto de confluencia, colocando su candidatura por encima de las posibilidades de elegir una persona más capaz, que podría venir inclusive de las filas que no son de la izquierda. No es simplemente no permitir el retorno de la corrupción de Castañeda, es también la posibilidad de hacer una gestión eficiente la que debería unirnos en la convocatoria. Al final, ¿debería seguir aceptando promover la candidatura de Susana, aunque no estemos de acuerdo con ella, ni convencidos de su capacidad?

Anónimo dijo...

Una alianza de la Izquierda con el PP será castigada por el electorado. Asumen que Susana es una incapaz, y que está rodeada de ineptos. Tiene en la cabeza que los PP son unos bobos.

Castañeda puede estar fuera.

A mí me importa Lima. El que la Izquierda llegue al poder lo único que garantiza es más corrupción que los apristas sin menos manejo. Mejor despoliticemos esto.

junio 02, 2014 2:50 p. m.

Anónimo dijo...

Debemos quemar todo Lima de la DBA, fusilarlos. Olvidarse de las elecciones.

Unknown dijo...

Existen tantos puntos de vista como lectores tiene el artículo. Cada quién ve según el cristal con que lo mire. Por mi parte creo que la política es la suma del ideal y lo real (principio teleológico y principio de la realidad). Eso hicieron Roosevelt y Stalin cuando se aliaron para salvar al mundo de la amenaza nazi. Ahora nos toca enfrentar a una red de corrupción que está tomando por asalto al Estado.

jaime huaman dijo...

Una alianza con Toledo seria el acabóse.