Para el viceministro de Energía. Luis Ortigas, lo que pasó en Sechura (dos muertos e incontables heridos) se debe a que la gente es ignorante y so conoce los beneficios de tener plataformas de gas y petróleo en la zona del mar donde recogen sus mariscos, y para sacarlos de esa condición, lo que habrá en los próximos meses serán talleres para que pescadores, agricultores y pobladores puedan saber cómo los favorece el proyecto Savia (ex Petrotech). Más o menos como si dijera que si hubieran estado mejor informados se hubiera evitado el conflicto con sus trágicas consecuencias.
Claro que un rato más tarde, la vicepresidenta Marisol Espinoza aclaró que la opinión de la población no había sido tomada correctamente en cuenta en el proceso, que la audiencia de comienzos de marzo había sido adulterada en varios sentidos y que habían funcionarios (dio los nombres) que eran responsables. Finalmente anotó que la opinión social era imprescindible para saber si el proyecto se hacía realidad. Un choque de opiniones al más alto nivel, después del cual no ha pasado nada.
Dos días después, sin embargo, ha estallado un escándalo de proporciones. Una investigación periodística ha demostrado que el director general de hidrocarburos, que es el directo implicado en la regulación de las concesiones y el segundo de Ortigas, Luis Zavaleta Vargas, era también uno de los grandes potentados del oro informal y que su empresa Universal Metal Traidings, que funciona desde 1999, factura 900 millones de dólares por exportaciones de oro de Madre de Dios y otras localizaciones donde hace unos día hubo fuertes huelgas que enfrentaron a los mineros con el gobierno.
Merino fue nombrado ministro el 10 de diciembre, Ortigas viceministro el 13 de enero, Zavaleta el 22 de febrero y las leyes de ilegalización de la minería informal, se dieron el 28 de febrero. ¿Existe alguna coherencia entre estas designaciones y las decisiones gubernamentales?, ¿por qué nombraron al acopiador si ya se veía el choque con los mineros del oro, y por qué no se le hizo renunciar a tiempo? El ministro arguye que es porque Zavaleta no lo dijo ni lo puso en su currículum. Pero nadie puede ser ministro y promotor de cuatro normas contra una actividad informal, sin saber todo lo que se tiene que saber de ella. ¿O es que aquí se necesita también un taller para superar ciertos grados de ignorancia?
Pero el que no tiene escapatoria es el viceministro Ortigas, porque por su ubicación tiene que haber sido el que proponga o dé el consentimiento para el nombramiento del director de hidrocarburos. Y ahí no puede hablar de su propia falta de ignorancia, ya que el hoy viceministro es director de Perupetro desde septiembre del 2006 hasta el presente, y su director de hidrocarburos ahora obligado a renunciar fue gerente de supervisión de contratos de esa empresa entre agosto del 2009 y febrero del 2012, es decir han cooperado en forma directa y se conocen por muchos años. Nadie puede creer que Ortigas no tuviera noción que su subordinado de tantos años fuera a la vez un afortunado magnate del oro informal, lo que debe haber marcado toda su conducta de vida.
Pero en el mundo de la tecno-burocracia unos se tapan a otros, y todos presumen que sus colegas sabrán manejar sus conflictos de interés. Aunque a veces las cosas no salen como se había pensado.
01.04.12
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