sábado, enero 31, 2015

La agenda de la gran concentración

Si El Comercio lo hubiese querido, la velocidad y resonancia del caso Álvarez y la  coyuntura del segundo semestre de 2014, hubieran sido otras. Si se recuerda bien, fue La República la que hizo una campaña sobre el asesinato de Nolasco y dio por segura la culpabilidad del presidente regional. Eso duró semanas y no pasó nada salvo declaraciones de un lado para el otro.

¿En qué estaba la gran concentración? En dale que dale, que Ramos no podía ser Fiscal de la Nación por ser primo de Nadine Heredia y por haberlo negado cuando se los preguntaron por primera vez, y que la cabeza del Ministerio Público debería ejercerla el fiscal Pablo Sánchez, que sólo tenía un voto (el suyo), en la Junta de Fiscales. La campaña de la gran familia de la prensa no prendió hasta que alguien hizo la conexión entre el Fiscal Peláez (no habría querido investigarlo) y Álvarez, y entre Peláez y Ramos  (que habría contribuido a la impunidad en Ancash desde la oficina de control. 

Ahí El Comercio, reajustó su ofensiva y dijo que lo de Álvarez era el peor caso de corrupción de la historia peruana y los fiscales supremos habían sido sus encubridores. De ahí siguió una campaña hasta la caída hace poco de Ramos (suspendido en el cargo) y la nominación a dedo de Sánchez, el favorito de calle La Rifa, que obviamente se ha puesto en línea con los Miró Quesada a los que debe el puesto.

El poder mediático, por tanto existe, pero a veces falla o se entraba porque sus operadores se creen todo poderosos y no lo son, en forma suficiente. Entre  la mitad de  2014 y fin de año, la prensa concentrada tomó el control de los casos Álvarez, Orellana y Martín Belaúnde, y dictó la agenda de la “anticorrupción” en el país. Hasta que se cayó el tema de la “colaboración eficaz” y los exprocuraores Salas y Vilcatoma, se quedaron en el aire.

Entonces, la gran familia decidió que si la realidad no los ayudaba a mantener la presión sobre el gobierno, peor para le realidad porque ellos podían crear una suya propia. Es la sensación que deja paso a paso la denuncia de Correo Semanal, sacado del anonimato, para meter la gran “primicia”, el gobierno se auto chuponea y persigue y de paso anda investigando a inocuos personajes de oposición, con los que conversan y hacen transas todos los días.

La trama es enredada porque pasa desde Jorge del Castillo, actual lobista de transnacionales mineras y petroleras, Marisol Espinoza que se mantiene distante de la pareja presidencial, y otros, hasta llegar a Alan García que tiene un informe de haber sido seguido en Lima, en días en que se encontraba en Madrid. En fin, cualquier cosa pero en el país ya se instaló otro “peligro” y otra manera de victimizar a una oposición que se mueve como una veleta. Si Humala se asusta con ella, será que está temiendo hasta su sombra. O que El Comercio quiere que sintamos eso.

31.01.15

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Nada de "anónimo", soy Ambrosio

El Comercio, Perú21, La República cumplen con su deber de reportar -desde su puntos de vista- al ejecutivo, parlamento y demás. Diario Uno no porque es oficialidts; su deber es "sembrar" dudas en los reportajes de los otros medios, por la sencilla razón que es un medio al servicio del Ollanta Humala.

Para ese fin Diario Uno usa diferentes métodos; insultar, como esta vez lo hace don Raúl; o imaginar una "conjura" en contra del (pobrecito) Ollanta Humala.

A don Raúl no le tiembla el pulso para intrigar, camuflar, pretender distraer a la opinión pública de la inoperancia, mediocridad y corrupción del humalismo.

Anónimo dijo...

Nadie mejor que tú para entender la coyuntura política, la concentración no ha dedicado ni una sola linea en lo referente a la falsedad del reglaje a García, han puesto el ojo en tumbarse a Urresti y a Jara que pueden ser una de las posibilidades de un humalismo en extinción, este 2016 se presenta incierto, para mi entender la carta es PPK y entre García que es solo un bluff o Keiko, volveremos a votar tapandonos la nariz si no hay otra carta de centro izquierda.

Anónimo dijo...

ambrosio hace gala de un humor absurdo cuando dice que El comercio y la prensa concertada cumple con su deber de reportar, cuando lo único que sigue es su propia agenda, haciendo invisible lo que no les conviene y resaltando hasta lo mínimo cuando no.

Quieres un ejemplo ambrosio? Es fácil, estamos a un mes de que Castañeda fue elegido, cuantas noticias le dedica Peru21 desde entonces? Si te pones a investigar no llegarás a diez, mientras que en el mismo lapso de tiempo Peru21 le dedicaba practicamente una cada día a Villarán, y no precisamente portadas agradables, de hecho el calificativo de Lady Vaga ya existía en el mismo lapso de tiempo, mientras que ahora, a Castañeda, nadie le dice nada, aunque no asista a las sesiones del concejo, para el Comercio eso es anecdótico.

Porque ese es precisamente el modus operandi del Comercio, mientras no sean elecciones ellos no necesitan hacer campaña por nadie, basta con ocultar y minimizar -a menos que sean demasiado evidentes, porque hay que guadar las formas- todos los anticuchos de los fujimoristas, apristas, y cualquier otro corrupto, y llevar al nivel de escándalo cualquier pequeño desliz de Humala, Nadine o Urresti.

Anónimo dijo...

Son tan imbéciles los de la DBA, con su prensa mediática, achorada y concentrada aliados con la mafia alanfujimontemudista y sus lacayos dizque "formadores de opinión", llámese el troll alditus u odla o ambrosio o falso ambrosio, la carachama de la delta, la leyva, la del rio, el cabrini rey con barba, hasta el pobre saldaña que no se dan cuenta que ya la juventud se levantó y comenzó a cuestionar el modelo neoliberal criollo y se da por descontada su incursión masiva en la política. Por ahora lo más rlevante es que lograron la derogatoria de la ley Pulpín con cinco movilizaciones.