lunes, enero 19, 2015

Colaborador o refugiado



Mientras el cáncer y la neumonía me enviaban a cuidados intensivos en plenas fiestas de fin de año, en lo que estábamos en esos días era que todos querían ser los “ases anticorrupción”, con noticia cedida por el otro, y en la que supuestamente dos cosas eran redondas: (a) que Martín Belaúnde Lossio era un foco de inmoralidad que ha afectado al gobierno, como lo prueban tanta gente con la que se reunía; (2) que mientras mejor se probara que la pareja estaba más vinculada , caería  de su peso que tiene que tenerles secretos tremendos (¿la plata de Venezuela?, por ejemplo).

En una línea muy ajustada a la investigación sobre López Meneses, hemos escuchado muchas cosas sobre  que hay que encontrar la pista hacia la mujer y el dinero, es decir hacia Nadine. Y la pista, no podía ser de otra manera que una construida con los instrumentos y relaciones del gobierno. Ramos Heredia, por ejemplo, al que lo botaron de Fiscal de la Nación después de tres días de tratar de salir de la crisis por algún lado. Si se recuerda en el caso de la casa superprotegida de Surco,  se ganaba el concurso con una foto del famoso operador con el Presidente, lo que lo haría automáticamente montesinista.

Precisamente en ese tipo de polarización en que a priori ya hay un culpable y si quiere defenderse que lo haga desde la cárcel. El punto es que así como no hay comisión López Meneses, sin Chichi y patrulleros, tampoco la hay sobre todo después de Figallo,  Roy Gates, Salas y Vilcatoma. La conclusión de que lo que quería Belaúnde era asumir la condición de “colaborador eficaz”, lo que han seguido repitiendo aún después de haberse conocido el pedido de residencia cuyo trámite está en curso hace algunas semanas, pero ambas realidades jurídicas son contrapuestas.  

¿Porqué se equivocaron  tanto y no han podido corregirse? Claramente porque desprecian a Humala en el sentido de que carece de pulso de maniobra. Y por que se han acostumbrado a zarandearlo  como un cosito  Pero en este caso es mucho más fácil creer que las decisiones políticas tomadas haya más  de proyecto  que de salvavidas. Pero la policía peruana y el periodismo tiene mucho idiota. Basta que una vaina cualquiera se suelte en medio de la sala para que las investigaciones y columnas se superpongan, una tras otra, como si hablaran de algo nuevo.

Tres días de cuidados intensivos no se los recomiendo a nadie, por el aislamiento y dificultad para hacer un mínimo seguimiento de las cosas. Pero a veces es necesario estar sólo en medio del instinto de muchos a ser parte del tumulto. Siguiendo la huella de esta nota mañana voy a preguntarme junto con mi lectores sobre lo que está probado y no probado del caso MBL: Si la batalla anticorrupción es seria saldrán a luz temas de fondo y no meras intrigas. Espero tener fuerza para ello.

16.01.15

1 comentario:

PERCY dijo...

FUERZA DR. RAÚL, EL PERÚ PROFUNDO (DE ARGUEDAS Y MARIATEGUI (JC)), ESTAMOS CON UD. EL UNUVERSO Y LA NATURALEZA ENTERA; PUROS, ESTAN CON UD. FALTA TANTO POR HACER, MUCHOS LIBROS QUE LEER...