Claro que el fundador de este diario, es un personaje
político. Estuvo en dos campañas electorales y tuvo en sus manos al único
diario que se jugó por la candidatura que apoyó al actual presidente ,
convencidos por entonces que el programa de La Gran Transformación era un
solemne compromiso con el Pueblo que Humala no cumplió.
Pero, como seguramente todos ustedes comparten, que la
permanencia de Martín Belaúnde en el foco de la tormenta por los medios y los
partidos vienen de otro lado, que podría resumirse como la intención de
considerar que MBL y OH –NH, son amigos íntimos y que cada acto del primero
reflejaba un punto de poder para el empresario.
Por lobby se va entendiendo que el que hace esto no es el
clandestino movedor de influencias (tipo Blume) sino el que alardea sobre lo
que es capaz de conseguir. Martín, en redondo se habría dedicado a mostrar que
era importante en el régimen y a cumplir por esta vía encargos de más alto
nivel: a pesar de que el 99% de la documentación personal de Belaúnde trataba
con regiones y antiguos amigos del personaje, odas las acusaciones y
señalamientos indican que aún sin pruebas, de hechos dolosos concretos: dos
asuntos se convierten en reiterados, cada vez más textos personales exhibidos
en público, y un silencio oscuro del gobierno.
Cada semana la tintinela es un mail más leído en público,
que presume una enorme red de poder, y cada semana que no se le la conclusión
es que protegen porque algo se oculta. Así el caso se ha hecho político porque
hay una campaña política que ha tenido ya atisbos de golpista cuyo blanco no es
el empresario sino sus supuestos grandes amigos presidenciales. ¿Quién decía
que todo apuntaba a Nadine. ¿Y quiere ahora que otro Estado les crea que es
puro ejercicio investigativo acusar de lobby, interferencia de poderes,
destituciones arbitrarias y mentiras continuadas , al gobierno carece de
trasfondo político?
Si hoy tuviéramos por lo menos una relación sobre delitos
reales: enriquecimiento no justificado,
licitaciones amañadas, coimas, etc, que muestren un paralelo entre Orellana,
por ejemplo y MBL, es decir crímenes comprobados y no supuestos, esto dejaría
de ser la confusión adrede que ha operado por meses, en los que no se ha
querido probar otra cosa que relaciones entre personas y empresas. Hoy, el
fundador de la actual etapa de este diario
exige ser tratado como problema político entre Bolivia Y Perú. No es
como dice el fiscal Sánchez una simple tipificación de hechos sino el proceso
en su conjunto.
Y ese, hace rato que se hizo recontrapolítico.
17.01.15
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