viernes, octubre 26, 2012

Los candados económicos

Tan seguro se siente Fritz de que Humala no podrá salirse del marco económico que se autoimpuso para evitarse el embate de la derecha, que ya no le cuesta nada burlarse en primera página del presidente que quiere ser entrevistado mientras corre por la mañana, sobre el tema de las supuestas gollerías de las que gozaba Antauro Humala, antes de ser confinado ilegalmente a la base naval. Como ya no hay nada que temer en la parte que más interesa (el bolsillo de las grandes empresas, de donde cobran los directores, consultores y publicistas, que en Fritz son un solo oficio), ya no hay necesidad de ocultar las claras afinidades con el fujimorismo en esta hora histórica del indulto para papá Fuji, donde se está jugando el reagrupamiento derechista para la siguiente etapa.

El hecho es que Fritz cree que el problema de Ollanta no es si ante el desgaste que está empezando a sufrir y el choque cada vez más duro con sus electores, va a tener en algún momento la tentación de regresar algunos pasos sobre su programa de “gran transformación”, actualmente condenado al olvido, eso puede ocurrir, pero no puede. Ya está atado y empaquetado, de modo que no puede salirse de donde ha quedado colocado. Cuatro razones son esgrimidas como los cerrojos que han anulado al otrora candidato del cambio y entregado todo el campo de maniobra a la peor derecha: (1) la Constitución de 1993, mil veces repudiada por Ollanta, que sin embargo encuadra su gobierno y que en el súmmum de la confusión se ha vuelto sinónimo de “Estado de derecho” del cual es imposible moverse quiérase o no; (2) TLC con Estados Unidos y otros, que han fijado compromisos de política económica que se entiende que no pueden desconocerse sino a través de un proceso largo que va más allá de una gestión gubernamental; (3) el grado de inversión, que así como ensalza al Perú como paraíso de las inversiones, atrayendo capitales, también puede convertirse en un anti-grado que las aleje y coloque al país en cuarentena; (4) la independencia del BCR, encabezada por un neoliberal que perdió las elecciones pero que puede usar la política monetaria para modular al gobierno.

Ven, no hay salida, dice animoso Fritz. Y eso que no se toma el tiempo para mencionar otros detalles como el inmenso poder de Castilla en el gabinete y su línea directa con la primera dama; los fondos de reserva fiscal controlados por el MEF cuyas claves de uso están en manos de la tecnocracia; el poder de las trasnacionales y los bancos; etc. Es decir si el presidente intentó evitar que lo samaqueen, como lo están haciendo con la alcaldesa de Lima para detener su plan de reformas, lo que ha conseguido es asegurar el chaleco de fuerza preparado durante veinte años para prevenir resultados electorales como los del 5 de junio. Lo peor es que una vez copado por el lado económico y con el sistema fuera de peligro, ya no hay problema de darle a Ollanta por el lado que sea, especialmente el que más le duele que es el de la familia. Du Bois dice que el panorama tal como lo describe es “tranquilizador”. El tema es para quién, porque los conflictos y las huelgas de los últimos meses no han venido del aire.

26.10.12
www.rwiener.blogspot.com

No hay comentarios.: