A nosotros poco nos importa lo que pasó el sábado, porque nuestro tema es el jueves. Si el jueves no previeron la resistencia de los achorados que bajaron de los cerros y de los delincuentes contratados por los mayoristas, ese es el único problema que debemos discutir, y si después se impusieron con un mayor apoyo policial y determinación política, eso ya no cuenta, porque si no quién explica lo del jueves. Y si en la trifulca murieron cuatro que por sus antecedentes tal parece que eran parte del bolondrón delincuencial y la Municipalidad y la izquierda no están llorando por estas víctimas, es porque tienen doble rasero: uno para contar muertos campesinos en Cajamarca y Espinar, y otro para los choros de La Parada, y lo dice Martha Chávez que cree que toda vida es valiosa salvo que sea de Barrios Altos, La Cantuta y otras bajas causadas por su gobierno.
La bulla política ha llegado a estridencias mayores. Porque todos saben que la parte operativa de la intervención, que va desde la inteligencia informativa, la estrategia y el plan de acción, así como la conducción del operativo estaba en manos de la Policía. Sí, la misma Policía verde que ha causado casi veinte muertos en lo que va de este gobierno en diversos conflictos sociales, sin que a la derecha les conmueva en lo más mínimo, y también la que ha pagado con sus vidas los errores de Kepashiato y otros en la lucha antisubversiva. No es la Municipalidad la que tiene que derrotar a los vándalos en las calles y su responsabilidad política se refiere a si era correcta la decisión de bloquear antes que desalojar, y de hacerlo ahora y no antes ni después. Esa es la medida que llevó a herir definitivamente la resistencia de los reyes de La Parada y toda su corte, imponiendo la autoridad municipal.
Pero igual siguen chillando el burbujito Beingolea, el fujimorista Juan Díaz Dios, el aprista Mulder y otros para los cuales este es tiempo de cacerías de izquierda y no me vengan con que el operativo de traslado se realizó y la alcaldesa logró lo que se proponía, ¿y el jueves?, ¿quién responde por el jueves?, ¿dónde estaba Susana el jueves?, ¿y cómo es que botaron a un policía del caballo el jueves, y que murieron dos en medio de las pedradas y los saqueos, es decir todo esto que forma parte de la debacle de Villarán según la dupla Aldo-Marco Turbio? Nadie juzga a los ejércitos por el inicio de la batalla sino por el resultado final de la contienda. Lo que no importa es si alguien empieza ganando y termina en fracaso. Por lo mismo tampoco se juzga una acción que pudo tener improvisación y desinformación de principio, pero que resolvió sus errores rápidamente e impuso sus objetivos en el desenlace final. ¿O es que alguien cree que en otros desalojos o intervenciones todo estuvo planeado de lo más bien?, ¿y lo que pasó en el bosque de Pómac en Lambayeque?, ¿y las varias veces en que no se pudo sacar a los minoristas que tenían ocupado Santa Anita?, ¿y Bagua?
Aquí el problema era si Villarán se iba a quedar con los brazos amarrados por la negativa de los mayoristas a salir del foco de La Parada o si se cumplía la orden municipal. Se cumplió. Pero hubo un jueves en que no se alcanzó el resultado y eso es todo lo que le interesa a la DBA.
01.10.12
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