sábado, abril 18, 2015

Las salidas de la izquierda

Ensayando la ironía que le sale tan bien, aunque no sirva para mucho, Carlos León Moya ha clasificado a la izquierda en una junta “vergonzante y comodona” pero con plata, frente a un grupo coherente, pero marginal y sin plata. Son imágenes, como la de los septuagenarios abrazados a Simon para acercarse al centro. Si uno entiende todo el problema desde esta perspectiva, desaparecen la concentración mediática; los candidatos ya implantados en las encuestas; el papel diferenciado del gobierno con su supuesta oposición que cierra las alternativas; y hasta el outsider de derecha inventado para tapar todos los resquicios.  

Las diferencias se reducen a Yehude y sus lazos con el centro, la marginalidad de los coherentes y el supuesto que unos tienen plata y otros no. ¿Será verdad que estos son todos los problemas? Voy a decir lo que pienso. Si bien no me gusta el concepto de “centro izquierda”, por los contenidos ambiguos que siempre lo han rodeado, lo que es claro es que en el escenario del 2016, no sólo Tierra y Libertad es marginal, sino toda la izquierda, y que una de sus responsabilidades es precisamente resolverla sobre la marcha para tratar de representar a la parte del país que no quiere ser atrapada en la disyuntiva Keiko-Alan-PPK.

No es la coherencia (creerse lo únicos buenos del barrio), lo que determina la marginalidad, sino la incapacidad para comprender el momento político. Se me ocurre que Tierra y Libertad debería buscar el diálogo y los acuerdos concretos con el otro frente político, pero de lo que estamos llenos es de ataques que parecen imaginar que cuando desenmascaren a la otra parte, se vendrán torrentes hacia el lado de los duros y problema resuelto. Pero así como la posibilidad del triunfo de Castañeda no hizo reaccionar a los que se pelearon con Susana, que la vieron caer, mientras se mantenían con los brazos cruzados, ahora nos corremos el riesgo de que la derecha más cavernaria pase sobre nuestras cabezas y se diga que eso se debe a que los viejitos se juntaron con Simon.

Es casi tonto decirlo, de que la sociedad con Simon responde a la vigencia de su inscripción electoral. Una concesión a la realidad, se diría. Pero, ese es el único sentido en que Yehude puede servir para ampliar los aliados tanto como se pueda. Ya me he preguntado en otra parte, si el 51% que hizo ganar a Humala, con su 31% de gran transformación y 20% de antifujimorismo democrático, existe en alguna parte y puede ser representado parcialmente. Eso no se puede conseguir con una simple inscripción y una patota de partidos de izquierda, pero tampoco con una coherente marginalidad, sin recursos. Si quieren empezar a contar el final de a historia antes de las batallas principales, que así sea. Por mi parte todavía tengo esperanzas de un entendimiento.

18.04.15

6 comentarios:

Anónimo dijo...

Nada de "anónimo", soy Ambrosio

Esta vez es don Raúl nos regala realismo mágico: cree que el electorado desea, sin saberlo, de una izquierda que le solucione los problemas. Primero (el electorado) sabe que existen, y segundo, (el electorado) los ignora porque sabe que son un grupo de engreídos sin madurez ni estudios, además de irresponsables: no les confían la compra del pan del desayuno.

Y terminan asociados, en el más cínico oportunismo, a tíos como Humala o Yahude. Don Raúl le llama a eso "concesión a la realidad"; ¿cómo le llamará a caminar, ¿concesión con la gravedad?

¡Renuncien al marxismo leninismo! ¡Renuncien al totalitarismo! Estudien economía, dejen de repetir idioteces como "modelo exportador primario", ¿no se dan cuenta que describe a la Federación Rusa o Noruega?; no se opongan a la minería, a los tratados de libre comercio, a la propiedad privada.

Don Raúl admite que "no me gusta el concepto de “centro izquierda”, por los contenidos ambiguos que siempre lo han rodeado". Este es nuevamente la izquierda taliban fundamentalista cavernaria: "sólo yo tengo razón". No se enteran que viven en un mundo que aspira la libertad.

Les irá mejor cuando dejen de odiar al Perú y despreciar a los peruanos. ¿Qué no hacen eso? Qué sí: se les nota. Se sienten estupendos y superiores cuando no lo son, el electorado los percibe como todo lo contrario, con más hambre, deseos de riquezas que los alangarcías que andan por allí. Sospechan que, en el poder, serán más corruptos y ladrones, con el agravante que, en el poder, intentarán de imponer un proyecto totalitario en el que no saldremos en medio siglo, como en Cuba.

Héctor Mejía dijo...

En las últimas elecciones municipales un sector de la izquierda pensó que "correrse al centro" para formar "la gran coalicion contra Castañeda, el dictador" era la solución para la victoria, y ya sabemos en que terminó esa coalición.
Ahora se insiste en la misma fórmula, con un nuevo vientre de alquiler, el "marxista" Yuhude Simon y no hay que ser adivinos para vaticinar el nuevo descalabro.
Para que la izquierda, en el panorama actual que bien describe don Raúl, tenga alguna posibilidad de triunfo tenia que haber trabajado desde hace años para fortalecerse, renovarse y presentar propuestas serias al electorado para ganarse su confianza, pero lo que se ve hasta ahora es desunión, improvisación, angurria y torpeza.
En resumen, al electorado no se le puede subestimar presentando cualquier menjunje bautizándolo como "izquierda" o "centro-izquierda", porque el electorado lo va a rechazar como al menjunje que armó Susana Villarán en las últimas elecciones; al elctorado la izquierda tiene que presentarle planes y propuestas serias para tener alguna posibilidad de éxito.

Anónimo dijo...

Saludos desde Bruselas

¡Cuánta verdad en lo que dice tristemente Raúl respecto a la Izquierda ante las elecciones presidenciales que se vienen!: "No es la coherencia (creerse lo únicos buenos del barrio), lo que determina la marginalidad, sino la incapacidad para comprender el momento político".

Históricamente las izquierdas ganan las elecciones cuando se presentan como una solución (económica) razonables de los problemas. Acuden a las urnas pensando en su bolsillo, se preguntan ¿con quién me va ir mejor a mí y a mi barrio, ciudad, provincia y país? Si concluye que es la izquierda, pues vota por ellos; usan el mismo razonamiento utilizado para seleccionar al cirujano de su madre e hijo.

Las peleas, sentirse "lo únicos buenos del barrio" no sirve sino para el ensimismamiento destructivo.

Un gran abrazo, Raúl
CJ

Anónimo dijo...

No hay otra "salida" para la izquierda que, para el bien de la humanidad, la toma del poder a la fuerza. Las elecciones son idioteces burguesas.

Anónimo dijo...

Y ahora el vicepresidente de la confiep, el segundo boss de la mafia empresarial nada menos, es descubierto estafando al estado, uno de los miembros mas preclaros del cogollo derechista, uno de los impulsores de la ley pulpin, un empresario pendejo, corrupto hasta las cachas como todos ellos, un tagarote que ha inflado su fortuna con megociados con el estado, pero al cual no le gusta pagar impuestos. Por que no pues, que paguen impuestos los misios, los ricos no tenemos porque mantener a nadie con nuestra plata.
Ese es el pensamientos de estos hijos de put...gamonales asolapados, terratenientes puñeteros, mafiosos excelsos y hampones de nacimiento.
Este delincuente hijo de la chingada es el prototipo de todos estos gángsters, enchiquerados en ese cubil llamado confiep, arrumados en ese nido de ratas llamado cámara de comercio, hermanados en esa cloaca llamada sociedad de mineria donde todos los miembros tienen el trasero de oro y en vez de sangre petróleo.
Esa es la realidad de este pais que exige cambios inmediatos, una mancha de forajidos con plata que en complicidad con la mafia politica derechista se creen dueños de todo y de todos, y esto va continuar si no se nos sale el indio y todos juntos: los pescadores costeños, los agricultores serranos y los nativos amazonicos no nos unimos y los ponemos en su sitio.
Los obreros, los estudiantes, las madres de familia y hasta los ancianos unidos como un solo puño macizo y justiciero, tenemos el deber de salir a pelear y no parar hasta no desaparecer a este ejercito islámico derechista y neoliberal, todavía estamos a tiempo.
Ha llegado el momento de deslindar con estos chorazos, si o no Aldo M, si o no gusano ambrosio.

Anónimo dijo...

Wiener que te parece la portada de peru 21 hoy dia ????, muy de la gran concentracion ????? digo... a diferencia de la portada de diario uno en los ultimos 20 dias con la portada de alan garcia....porque sera????