martes, octubre 14, 2008

Hábil García

Muchos celebran la habilidad de García para sacar de la manga una carta marcada con el peludo rostro de Yehude Simon, cuando Del Castillo aún esperaba una fórmula para salvarse. Nos descolocó a todos porque lanzó el golpe donde menos se esperaba. Puede ser. Pero tal vez no sepa adonde puede llevar tamaña audacia.

Porque habría que preguntarse cómo pueden caber en la misma persona el hiperpolítico que ahora tiene discutiendo al país los motivos del nombramiento de Yehude, tapando los temas de corrupción, crisis económica, violencia, demandas sociales, que constituyen la verdadera agenda política del país y que el gobierno es incapaz de resolver; y el torpísimo líder que orientó al APRA a pactar la mesa que ahora dirige el Congreso.

Entre la votación de julio, que pareció haber enterrado la posibilidad de una oposición exitosa, y la escena del último jueves, con Del Castillo irrumpiendo en el hemiciclo, provocando la estampida de todas las bancadas no apristas y convirtiendo al partido de gobierno en una solitaria minoría sin aliados, hay un fracaso redondo de estrategia y una incapacidad manifiesta para comprender lo que ocurre en el Perú.

Estaba claro en julio que el acompañamiento del fujimorismo iba a estar cada vez más condicionado a sus propias necesidades políticas, en la medida que se aproxima el desenlace del juicio contra el ex dictador y que esto implicaba dejar constancia, cada vez que pudieran, que ellos podían decidir la victoria (caso de la mesa directiva) o la derrota del APRA (caso de la ley de la Selva y de la censura a Del Castillo).

Ese poder se los regaló el hábil apostador de nombre Alan García. Se rodeó de tránsfugas que hoy no sirven para nada e ignoró la presión social sobre el gobierno. Hoy, García opta por una especie de fuga por delante y en ese camino se encuentra nuevamente con la hostilidad del sector político que tuvo más cerca en estos 27 meses de su segundo mandato.

¿Quién va a ganar? Si se mira el corto plazo, es claro que ahora el aislado es el fujimorismo, con una izquierda y derechas desconcertadas, pero que no alcanzan a declarar su hostilidad al nuevo premier ya que nadie exactamente sabía que quería decir cuando pedía un premier independiente. Pero la apuesta que viene del Fundo Barbadillo y aplica Carlos Raffo intuye que el episodio Simon va a ser más corto de lo que se espera y que en su desenlace ellos pueden acrecentar su presencia dirimente.

La crisis está madurando rápidamente. Y para eso se van a requerir habilidades mucho mayores que las de un prestidigitador que saca conejos del sombrero.

15.10.08
www.rwiener.blogspot.com

No hay comentarios.: