lunes, diciembre 26, 2011

Una guerra sin prisioneros

En mi libro “El Reeleccionista” (1998), cuya segunda edición ampliada lleva el título de “Bandido Fujimori” (2000), hay un capítulo dedicado a la Operación Chavín de Huántar, en cuyo desarrollo planteo una tesis, que hasta hoy considero la más razonable, en el sentido de que Fujimori, Montesinos y Hermoza planearon que el ataque por el túnel debía concluir con la muerte de todo el comando del MRTA que había tenido el control de la casa del embajador de Japón por cuatro meses y retenido hasta el último día a 74 de los más de 500 invitados reducidos y secuestrados en la noche del 17 de diciembre de 2006, seleccionados por su representatividad del régimen o su pertenencia a misiones diplomáticas.

Fujimori y su cúpula no querían sobrevivientes, no sólo porque era su manera de cobrarse la humillación por el secuestro del hermano del presidente, varios ministros y generales, o por aquello de escarmentar a futuros repetidores de este tipo de acciones, sino por una razón sin duda mucho más importante: porque el proceso previo a la intervención fue una negociación con altos funcionarios del gobierno con los emerretistas, en el que existieron acuerdos avanzados; asimismo se comprometió la participación de gobiernos de terceros países; y hubo, adentro y afuera, quienes cumplieron un papel en lo que aparentaba encaminarse hacia una solución sin sangre: cardenal Cipriani, almirante Giampietri, entre otros.

Tengo la certeza de que hay secretos de este episodio que los miembros del MRTA se llevaron a la tumba. Y que los demás guardan celosamente y por eso les irrita tanto que se investigue sobre lo que realmente pasó en esos meses. Eso, por supuesto, ha favorecido un enfoque unilateral que sólo hace remarque en la heroicidad de los 180 combatientes que doblegaron a los 14 secuestradores, y que de alguna manera levanta los hombros como si unas cuantas ejecuciones de “terroristas” no representaran nada. Más aún, se dice que si hubo ese “pequeño desliz” de fusilar los rendidos, los culpables serían los buitres de Montesinos y Huamán Azcurra (actualmente en libertad), que están denunciados en un juicio que nunca empieza y cambia de sala a cada rato.

Y es que el problema es que nadie de afuera hubiera podido llevarse los prisioneros, sin un consentimiento de los jefes de la operación Chavín de Huántar, y sin que los mismos comandos fuesen testigos del hecho como lo fueron varios policías del perímetro y el secretario Okura, que vieron como reintroducían a los rendidos en la casa de donde saldrían muertos. En otras palabras hubo responsables del comando que facilitaron el crimen y que probablemente tenían órdenes de hacerlo, y ha habido encubrimiento de los que han callado lo que saben de estos sucesos.

Seguramente muchos piensan que esclarecer estas responsabilidades es un ejercicio inútil si se logró el objetivo de derrotar el secuestro y recuperar a la mayoría de los rehenes. Bueno, ahí justamente es que reside la explicación de porqué el Estado peruano ha disentido con la CIDH y podría fracasar ante la Corte, que no es una instancia “caviar” como dicen algunos, que seguramente siguen creyendo que los derechos humanos son una cojudez, sino un tribunal al que estamos sometidos, como lo estamos ante el de la Haya al que pedimos que resuelva la diferencia de límites marítimos con Chile. Nadie puede decir que el juez no le gusta y correrse de la justicia.

Pero aquí lo más grave es que nos quieran hacer creer que el tema de este juicio es ideológico en el sentido que exigir el respeto de las reglas de la guerra sería favorecer al terrorismo. La opinión civilizada piensa al revés: que los Estados y las sociedades se convierten en terroristas cuando se eliminan las garantías y el poder puede matar fuera de combate, simplemente porque tiene las armas y un profundo velo de impunidad. Las cortes internacionales se crearon precisamente para limitar esos poderes y descorrer todos los velos que ocultan la verdad.

27.12.11
www.rwiener.blogspot.com

3 comentarios:

PLANCHAS DE ACERO PERU dijo...

no puedo conseguir los libros de raul wienner alguien puede ayudarme?

PLANCHAS DE ACERO PERU dijo...

no puedo conseguir los libros de raul wienner alguien puede ayudarme?

Raúl Wiener dijo...

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Raúl