Ministra Verónica Zavala

¿Por qué cree usted que la señorita Verónica Zavala está sentada a la diestra del señor Presidente como ministra de Transportes?

¿Será porque tenía muy buenas ideas, como esa de la "tolerancia cero", que no es sino una campaña de inspecciones, para acabar con los accidentes de las empresas de servicio masivo de pasajeros que circulan por las carreteras del país?

¿O, tal vez, será más bien que esta eterna funcionaria del Estado había dado evidencias de disponer de los conocimientos necesarios para sacar al Perú de la situación casi indigente de su aviación comercial, cuyo mercado está copado en 70% por una línea de nacionalidad chilena y donde la interconexión del país, especialmente con sus zonas más alejadas, es un imposible dado que las empresas sólo se movilizan a los destinos más rentables, como Cusco, Iquitos y Arequipa?

¿Tendrá que ver con ajustarle la tuerca a Telefónica para que se reduzcan los abusos contra los usuarios, los cobros indebidos y en exceso, el pésimo servicio técnico, el bloqueo a la competencia, etc.?

¿Habrá estado interesada la postulante a ministra en potenciar Enapu (empresa de puertos), Serpost (de correos), los programas de construc­ción de carreteras, la edificación y equipamiento de seguridad de los aeropuertos, etc.?

El currículum que el presidente García revisó antes de nombrar a la señorita no dice nada de esto. Habla de que ella fue asesora de la Presidencia del Consejo de Ministros en 1995, miembro de la Comisión de Privatización Copri (hoy ProInversión) , consultora económica del ministro Baca Campodónico (actualmente preso), directora ejecutiva de Fonafe (empresas públicas) con Goldemberg y Boloña, secretaria de Gestión Pública de la PCM con Dañino y Kuczynski, etc.

Sáquese un mínimo común múltiplo de todas estas funciones burocráticas y se verá que la especialidad de Verónica no tiene que ver con transportes, sino con privatización. Y a eso la llamaron. Para que entregue los aeropuertos de provincias a la familia García Miró en agosto de 2006, y vaya concediendo carreteras donde el negocio es el peaje, o reparta puertos como se prepara para dentro de pocos días en Iquitos y Yurimaguas. Para que arregle con Telefónica que la llamada de un sol, en teléfono público, dure el doble de tiempo, en vez de eliminar la renta básica.Es obvio que sirve para eso y no para mejorar el transporte. ¿Cuántos muertos está costando este desacierto?

15.08.07

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