jueves, septiembre 15, 2011

¿Y dónde está la DEA?

Los Estados Unidos en la política antidrogas

Hace unos días medios locales informaron que la embajadora de Estados Unidos les regaló un paseo en helicóptero de bandera de los Estados Unidos por la selva peruana, al ministro del Interior y al general de la DINANDRO, junto con el jefe del CORAH y de la DEA, y se encargó ella misma y sus asistentes de mostrar los cocales desde el aire y algunas pozas de maceración. El jefe de DEVIDA no estuvo invitado.

Las historias que la selva cuenta sobre el CORAH (policía militarizada encargada de la erradicación de cocales) y la DEA, son bien distintas a las que nos relatan los periodistas que muy de vez en cuando llegan a las abruptas selvas del Huallaga a realizar “informes” y moverse en los helicópteros de la erradicación. Las cámaras que llegan a los caseríos y las pozas generalmente no muestran personas, ni capturas y requisas. Pero en las comisarías obran numerosas denuncias de robos de bienes de las viviendas de los erradicados, maltratos físicos y otros abusos. Los del CORAH llegan dirigidos por miembros de la DEA que certifican la erradicación y contemplan sin intervenir la violencia con la que se trata a los cocaleros.

En Lima se dice que se trata de contener el flujo de droga que sale de la selva. Pero en las zonas de erradicación las fuerzas se mueven como en un escenario de guerra. En Pucallpa hay una central de la DEA al lado de un cuartel del CORAH. Ambos operan sin ninguna relación con las autoridades regionales y locales, toman la dirección de la torre de control del aeropuerto cuando movilizan sus aviones y helicópteros, mueven personal hacia el exterior y desde otros países sin regulaciones de la FAP, migraciones o cualquier otro organismo estatal. En Tocache la DEA ha metido millones en renovar el aeropuerto que está al servicio de la actividad que llevan adelante con el CORAH.

Para muchos habitantes de la selva lo que es evidente es la impunidad con la que pueden actuar los agentes estadounidenses. Pueden entrar y salir del Perú sin ser registrados, dirigir las labores de erradicación, la captura de dirigentes cocaleros, y podrían sin ningún problema llevarse prisioneros y la droga a otro lugar. Personas que han trabajado en la zona señalan que Montesinos hacía tratos directos con la DEA, para mantener una presión sobre los cocaleros y sacarse de encima a algunos narcos que actuaban por su cuenta, logrando articular un cartel de los grupos más poderosos que trabajaban para él. Para los agentes extranjeros esta era una manera de reducir la oferta de droga y concentrar los ingresos. Curiosamente el zar antidrogas de Washington, tomaba la política del régimen de Fujimori casi como un modelo de tratamiento del problema, hasta que empezaron a descubrirse los casos de Vaticano, el narco avión presidencial y otros que mostraron la penetración de las mafias en el Estado. ¿Y dónde estaba la DEA?

Once años después del fin de la dictadura, con Fujimori y Montesinos presos, la política contra las drogas no ha sufrido ningún cambio: el CORAH sigue persiguiendo campesinos, supervisado por la DEA; los norteamericanos controlan las rutas aéreas de la selva y se dan el lujo de escoger a qué funcionarios del Perú pasean por los aires para mostrarles su propio país; los insumos de la droga llegan regularmente a las pozas y la droga sale pasando todos los controles. Pero al país le quieren vender la idea de que el problema es Soberón por lo que dijo en sus reuniones con las organizaciones cocaleras, o por los mails que remitió desde su despacho en DEVIDA. Pero lo que arde no es que haya dicho que las erradicaciones son ilegales e injustas, sino que esté en un puesto que siempre estuvo ocupado por operadores de la Embajada de Estados Unidos. La señora Likins ha traducido su molestia en una visita a Palacio sin trascendidos y en un paseo de funcionarios peruanos en el que no se invitó al jefe de DEVIDA.

15.09.11
www.rwiener.blogspot.com

9 comentarios:

Marcela dijo...

En efecto, esa opinión que quiere confundir coca con cocaína, cocalero con narcotráfico, es de un sector de la prensa, que debe ser cuestionada. Es ese sector que considera el problema de la pobreza como problema de pobres, no le interesa que la erradicación de la coca sea la erradicación de los cocaleros, y es lo mismo con la reducción de la pobreza como la reducción de los pobres como observa también el Presidente Ollanta en su libro reciente.

En realidad, estas estrategias denominadas “erradicación” no son sino parte de un proyecto de destrucción sistemática de los pueblos indígenas andino-amazónicos, que encuentra toda justificación para declararnos como enemigos del Perú a los mismos de esta tierra. Estas que se llaman “erradicación de la pobreza”, “erradicación de la coca”, son claramente “erradicación de los indígenas”.

La aplicación de esta ideología de la guerra es pues fatal. Recordemos nomás lo aplicado en la lucha antisubversiva durante la época de la violencia política, de las década 80 y 90, para atrapar un terrorista tenían que matar cuanto campesinos quechuas aparezca al frente, puesto que así habría la posibilidad de matar un terrorista al menos, o sea, confundir campesinos con terroristas, cocaleros con narcotráfico… es una estrategia…

Anónimo dijo...

Los que apoyan la política nortemericana acerca del problema no mencionan nunca, evidentemente de manera interesada, que lo que mantiene el negocio de la droga, lo que lo sustenta, o sea la base económica e insustituible , son los miles de adictos de las calles de las ciudades de Estados Unidos y Europa que sacan de su bolsillo, en cash, 150 dólares o 100 euros por paco, para mantener su adicción. Nunca mencionan que el negocio está allá, en USA o Europa, donde se pagan tales precios por la mercancía. Mientras los países consumidores no curen a sus adictos , o reduzacan su número, o legalicen la droga, ésta seguirá siendo el fenomenal negocio que es, el negocio más rentable del mundo y con los márgenes de utilidad más extrordinarios pues mientras exista una demanda de tales características existirá quien esté interesado en ofertar. Y tampoco se menciona nunca al cártel o cárteles norteamericanos de la droga, tan eficientes que pueden manejar el ingreso y la distribución de más de 300 toneladas de coca al año. Y tan poderosos que nadie los menciona. Y tan poderosos que sus cabezas deben estar en los estamentos más elevados de la sociedad norteamericana, tan poderosos que pueden crear leyes que mantengan el estado actual de las cosas invariables para que la cuenta la sigamos pagando los paises productores . Entonces : ¿ a quién realmente le conviene que se mantenga el estado de cosas actual ¿
No hace falta ser muy sagaz para contestar esa pregunta
Manuel Zambrano
DNI 07234784

Anónimo dijo...

1. Llama al Proyecto especial CORAH : "...policía militarizada encargada de la erradicación de cocales" . El trabajo de erradicación se lleva a cabo por personal civil (sin armas) y es función de la PNP la protección de los erradicadores.(por parte de personal de la Dinandro o la DINOES)

2. "...Las cámaras que llegan a los caseríos y las pozas generalmente no muestran personas, ni capturas y requisas" en las muchos operativos de interdiccion en los que participe, jamas se realizo violencia contra agricultores y/o residentes, generalmente estos huian al escuchar los helicopteros ( cuando habian piscinas de por medio)
‎(Lease piscinas :pozas de maceracion eso ya es delito )

3. "Los del CORAH llegan dirigidos por miembros de la DEA que certifican la erradicación y contemplan sin intervenir la violencia con la que se trata a los cocaleros..." FALSO, es cierto que en algunas ocasiones agente de la DEA asisten a interdicciones , que son las mínimas pero de allí a decir "contemplan sin intervenir la violencia" ya es otra cosa.
En este ultimo punto deberian tambien tocar lo que si es cierto y esta documentado, los erradicadores y miembros de la PNP que han sido asesinados por algunos inocentes cocaleros ( en turbas y con emboscadas apoyados por narcoterroristas o poniendo tramperas en los campos de cultivo
Yo soy Peruano y amo mi pais por lo mismo no permitiria el abuso a compatriotas mios, menos por parte de extranjeros.

‎4. "..Ambos operan sin ninguna relación con las autoridades regionales y locales, toman la dirección de la torre de control del aeropuerto cuando movilizan sus aviones y helicópteros"
Relación con autoridades : Todos los trabajos de interdiccion se llevan coordinadamente con las jefaturas de la PNP Dinandro, sea en Pucallpa, o Tingo Maria, es obvio que no se va a comunicar a un alcalde de una zona cocalera que se va a r ...

Movilización de aeronaves : hablare de lo que me consta y es básicamente sobre los helicópteros de la PNP los MI17 y los Huey, pilotados por efectivos de la DIPA de la PNP que parten de las bases de Pucallpa y Tingo Maria con planes de vuelo y permisos respectivos, esto no es una chacra!

(continua)

Anónimo dijo...

"... la captura de dirigentes cocaleros, y podrían sin ningún problema llevarse prisioneros y la droga a otro lugar"
Tiene acaso registrado algún dirigente cocalero "secuestrado" o desaparecido " en un avión de la DEA o de la PNP????
‎Con que ligereza se dice "llevarse la droga a otro lugar..."
le explicare algunos procedimientos por si creen que la autoridad peruana no existe en estos casos.

En un trabajo de interdiccion por miembros del CORAH o en un operativo de la PNP cuando se encuentran piscinas o pasta básica de cocaina, inmediatamente se pide la presencia del Ministerio Publico, los fiscales especiales viajan en ese momento en helicópteros desde Pucallpa o Tingo Maria (el punto mas cercano) y se realizan las actas de incautacion y/o destrucción(de incautacion cuando se encuentra PBC y destrucción cuando se hallan piscinas ) Conocí a valientes mujeres fiscales que realizaban estos viajes varias veces por semana.

En caso de hallarse a personas en las piscinas, estos son detenidos, pues ya están incurriendo en delito. Agricultores que se dedican a la siembra de coca no son detenidos.

Trabaje y con orgullo puedo decir que hice mi pequeña contribución contra el narcotrafico. Se que es un tema muy difícil y complejo.

No estoy en contra del nuevo jefe de Devida, pero tampoco se puede hablar así nomas por hablar. Se también que los de la DEA no son ningunos santos, pero no se puede meter a todos en un mismo saco.

Asi como no puedo decir que todos los periodistas son corruptos y vendidos y que responden a intereses. Informen pero con la verdad no a medias ni para crear desconocimiento del tema.
para terminar, siempre seré de la idea de la colaboración internacional contra este flagelo, pero respetando las soberanías y sometiendose a la autoridad de cada pais donde se desarrollen estos actos.

Marcela dijo...

Ciertamente “no se puede meter a todos en un mismo saco”. Pero la discriminación y la desigualdad social hacia las culturas indígenas no sólo se mantienen sino han profundizado, y son propiciados precisamente por nuestras propias autoridades, del cual ningún peruano responsable y respetuoso debería sentirse orgulloso, puesto que son efecto causado por la aplicación de estrategias como “la erradicación de la coca” o “la erradicación de la pobreza”, que afectan de forma tan dramática las formas indígenas de vida, y si está antecedido por una larga historia de violencia, tan solo al escuchar los helicópteros tienen que huir es porque están amedrentados. Por los altos índices de pobreza en el sector indígena que refleja el doble del que padece la población no indígena, y más de la mitad se halla en extrema pobreza, se puede comprender que estamos ante amenazas que son constantes o aumentan de intensidad para el sector indígena, un proceso que produce la destrucción de la mayor parte de las culturas indígenas y, en consecuencia, la diversidad cultural. Esto debe merecer al menos una reflexión como lo hace Wiener en este espacio, que anima a decir algo a quienes leemos de veras con gran responsabilidad.

Marcela dijo...

Quiero agregar que la confusión no es gratuita, tampoco el lenguaje militar de todo programa de “erradicación” es solo un conjunto de metáforas desafortunadas, es inherente a la propia estructura de talprograma. También la cosificación de la población objetivo es vital, en donde predomina la oposición binaria droga versus coca, narcotraficante versus cocalero (demanda versus oferta), etc. No es gratuito que traten de generar confusión, en que coca es a cocaína, o cocalero es a narcotraficante, es para definir (confundir) mejor el objeto de erradicación. Definiendo la coca como la presencia de droga, resulta ser la coca un absoluto negativo y un objetivo para la erradicación. Igual, definiendo al cocalero como el proveedor o como la presencia del narcotraficante, resulta ser el cocalero un absoluto negativo y un objetivo para la erradicación. Por tanto, coca y cocalero son materia de erradicación. Esto es que debe merecer reflexión profunda.

Walter Guerrero dijo...

Marcela: Si acudes al mapa de cultivos de coca publicado por UNODC observarás que existen 25 cuencas cocaleras. No son propiamente valles porque la coca es una planta rústica que crece en cualquier pendiente y le basta un poco de humedad para mantenerla con vida. La coca es un cultivo que no requiere de agua permanente, por eso es común que los "cocaineros" hayan deforestado más de 2 millones y medio de hectáreas de bosques primarios en la Amazonía para cultivar coca. Eso de "erradicación de los indígenas" es forzar una figura. Primero: de qué indígenas hablamos, en el Perú hay muy pocos grupos indígenas y la mayor parte de éstos son más bien amazónicos, curiosamente los cultivadores ilegales de coca proceden mayormente de la sierra, población que hace mucho tiempo empezó un proceso de mestizaje. Ocurre que las poblaciones dedicadas al cultivo ilegal de coca muchas veces terminan siendo dependientes del narcotráfico que les avía los cultivos, anticipándoles dinero para la siembra de coca, y termina involucrándolos en la producción y el transporte de drogas, así como en el tráfico de insumos químicos.

Walter Guerrero dijo...

Segundo: sería conveniente que describas las formas en que la "erradicación de la coca... afecta dramáticamente las formas de vida"... Repito, los indígenas amazónicos no siembran coca. Es más, rechazan este cultivo. Un ejemplo es la Comunidad Amazónica de Mebanadu, Ucayali, Anexo Andrés Avelino Cáceres, en las proximidades de Aguaytía, zona de amortiguamiento de la Cordillera Azul: en abril del 2010 remitieron un memorial quejándose de que colonos invasores los expulsaron de sus tierras para sembrar coca. Pidieron erradicar esos cultivos. Corah redujo la coca de ese sector. Ningún indígena se quejó, pero los cocaleros iniciaron una protesta que terminó con la toma de la central eléctrica de Termoselva. Hubo 113 detenidos y los dirigentes cocalero se escondieron aunque fueron capturados y terminaron en la cárcel. Ahora cumplen reglas de conducta.
Tercero: La pobreza y falta de oportunidades no está en relación al origen racial.
Cuarto: La producción de coca en el Perú desborda la demanda de chacchado.
...

Anónimo dijo...

Este artículo contiene varios errores.
Uno: el Corah no es una policía militarizada. Es un proyecto especial adscrito al ministerio del interior que opera con dinero proveniente de la cooperación internacional. Debido a que sus miembros han sido atacado en múltiples oportunidades desde 1984 cuando atacaron un campamento en Supte y mataron a machetazos a 15 erradicadores, hecho que se repitió en una emboscada en Corvinilla con la muerte de 8 erradicadores más, el gobierno decidió que la policía preste resguardo al trabajo de erradicación.
Segundo: Los helicópteros que utiliza la policía nacional para desplazar a los efectivos policiales y a los erradicadores están cedidos en uso a la policía nacional que también proporciona el combustible.
Tercero: La comitiva que viajó a Pucallpa lo hizo en un avión Antonov, policial, de allí abordaron los helicópteros policiales.
Cuarto: Los narcotraficantes no son tontos. Cuando escuchan los helicópteros y ven a los erradicadores y policías descender de las naves saben que les llegó su hora. Inmediatamente fugan y abandonan las pozas de maceración: en Aguaytía ya van 35 en 3 semanas.
Quinto: Cualquier tocachino puede confirmar que el Corah nunca ha operado desde el aeropuerto de Tocache. Lo que recuerdan es la operación policial de 1989 cuando la policía intervino casa por casa ante la presencia de un gran número de fiscales antidrogas que certificaron la legalidad de la operación. Se decomisaron casas, motos, autos, joyas, dinero en efectivo y por supuesto drogas. El jefe local, Vampiro, huyó despavorido y hasta ahora en Tocache algunos siguen buscando “el tesoro escondido de Vampiro”. Nunca lo hallaron, lo sí quedó en Tocache fue desocupación porque los colombianos se fueron para siempre.
Sexto: Corah no tiene “cuarteles”, son civiles que duermen en sus casas.
Sétimo: La política antidrogas es una política de estado. Legalmente, las autoridades locales y regionales no tienen competencia. Una lectura a la pirámide de Kelsen podría esclarecer la opinión del articulista.
Octavo: El único insumo indispensable para producir droga es la hoja de coca. Por eso siempre al costado de un campo de coca se encuentran laboratorios de droga. En Aguaytía: 35 en tres semanas.
Suspicacia: Si no hubo trascendidos de una visita a Palacio… de dónde el articulista infiere estas opiniones… quizá sea una elucubración.