miércoles, mayo 05, 2010

Nada de lo reaccionario me es ajeno

Tal vez este sea el peor momento para hacerse clerical y renegar del agnosticismo que supuestamente es una condición elemental de la intelectualidad liberal desde Adam Smith para adelante. Pero vayan a hacerle entender esto a Aldo M., tan entusiasmado como se encuentra en que la maquinaria de Cipriani le regale la venganza que acarició durante tantos años por su paso mediocre por la Universidad Católica, en la que no destacó ni como alumno ni como el freedom fighter que siempre se ha sentido, frente a los rojos de su época que creía que tenían el dominio de los gremios y los debates, porque los profesores ahora llamados “caviares” se lo permitían.

El Mariátegui de derecha es una invención posterior a su historia universitaria, ya que según todas las referencias el tipo no pintaba nada en el claustro, que es lo que él mismo confirma con la frase de “ya sabía que no iba a ejercer derecho” y que por eso hice una “tesis de pipiripá” (como sus artículos de pipiripá, de todos los días). Ahora, claro que sí, con el garrote de Cipriani ya no se permitirán alumnos como él, pero tampoco profesores como Pease (con fama de jalador) o Pina Huamán que lo desaprobó por no estar de acuerdo con el valor de uso y el valor de cambio, y habrá misa obligatoria todas las mañanas y se difundirá la sagrada doctrina del Dr. Mesía, de que la píldora del día siguiente es abortiva mientras no se pruebe los contrario.

Es impresionante como un liberal, que se considera nieto adoptivo de Milton Friedman (no le gusta el abuelo verdadero), puede volverse militante de la Legión de Cristo si eso le permite derrotar a sus adversarios. Después de todo es el mismo mecanismo que lo convirtió en aprista y alanista en el 2006, en 24 horas, luego que se dio cuenta que con Lourdes no le ganaba a Humala. Y más atrás lo que lo hizo fujimorista en los 90 y podría llevarlo a votar por Keiko como nuevo supuesto “mal menor”, como ya lo ha anunciado varias veces. Peor aún, la conversión podría no ser en segunda vuelta, si el mudo Castañeda insiste en decepcionarlo reclutando “caviares” como Bernales que le recuerdan a Velasco y a la estatización de la banca (que la decretó Alan García, al que le ha perdonado todos sus pecados estatistas e inflacionarios).

Hay un error en intentar interpretar al liberal moderno desde el punto de vista de la doctrina. Eso sólo vale para los que no hacen política, o periodismo, que es una forma de la actividad política. Puestos sobre el terreno del poder sólo son reaccionarios, que eligen al Opus Dei, contra la iglesia progresista, que es lo mismo que decir a la herencia de Riva Agüero sobre la universidad real que existe desde hace muchos años; que adoptan el racismo tipo ABU que cree que ser puneño es un defecto congénito y que piensa que el Perú es lo que es porque los españoles no terminaron con los indios; que sueñan con el viejo civilismo, pero se adaptan al fujimorismo y el aprismo; es que una cosa es ser liberal y otra cojudo, que es lo que justifica cualquier cosa.

04.05.10

www.rwiener.blogspot.com

4 comentarios:

Nicolas dijo...

Ahora todo es un reacomodo de lo que queda, existe una falta de liderazgo increible al punto que la clase politica esta en manos Fujimorista por un lado y de ex-izquierdistas que no confian en Humala y se alian a Castañeda o Toledo. Al final todos pierden identidad los que los vuelve vulnerables e promiscuos a vieja doctrinas que se incuban desde las epocas Fujimoristas. Nada que ver con las antiguas posiciones reacionarias de los 70 que permitieron verificar posiciones claras de direccion Politica.

Anónimo dijo...

Para algunos hijos de puta las masacres, las injusticias, la barbarie en el Perú comenzó sólo después que una explosión se escuchó cerca de su casa.

Aquella mañana, -tuvo la concha de contarlo- enmierdado hasta las orejas, sollozando desconsoladamente prometió vengarse, convertirse en el Aquiles con napalm en mano y hacerse escuchar a carajos y putamdres.

Antes de aquel aciago día de la explosión, -afirmó el ‘mermelero’- el país “estaba de putamadre”.
Es decir, no sólo es un fascista altanero, sino un ignorante supino, asiduo de Wikipedia, cuya data trata de pasar por propia.

Las masacres y arbitrariedades que se dieron a través de la historia, para el hijo de puta fueron inmaculados litigios que se ventilaron en las Cortes judiciales, donde, además, primó la sensatez e imparcialidad.

Los abogados de campesinos, sindicatos, mineros de la Cerro de Pasco, de los trabajadores de la IPC y los esclavos del caucho y las minas puneñas… fueron jurisconsultos ‘A-plus’ cuyas demandas sociales y gremiales de los últimos 180 años fueron conseguidas en el Palacio de Justicia virtud de la razón y el imperio de la Ley.

El hijo de puta llama “legítima” la masacre aprista en El Frontón, esto lo impulsa a cambiar la Historia cuando afirma que la izquierda a lo largo de la República ha sido la madre de la violencia.

Es decir, el sindicalismo y la lucha obrera no fue la respuesta a los abusos de la Revolución Industrial. Por contrario, se trató de un paraíso donde no existieron los “sweat shop”, tampoco los ‘rat’s nest’ para arrasar a fuego y muerte con el sindicalismo continental. Sencillamente las denuncias y planteamientos de José Carlos Mariátegui y Manuel Gonzáles Prada, por dar dos ejemplos, fueron puras huevadas…!

Para este hijo de puta las Ocho Horas de jornada laboral en el hemisferio occidental no se consiguió con cientos y cientos de muertes, encarcelamientos, vejaciones, crímenes e injusticias.

Para el hijo de puta fue tan justo, honesto e inmaculado el comportamiento de la “derecha” industrial/agraria que no fue necesario huelgas, jornadas de sacrificio, marchas y paros históricos.

El estatus actual del trabajador, según el hijo de puta, se consiguió a iniciativa de la “derecha”:

“Antes que las corruptas dirigencias gremiales presentaran sus pliegos de reclamos, la gerencia de la empresa por iniciativa propia ya había ordenado el incremento salarial…”

La reducción de 16 a 8 horas de jornada laboral fue una “sorpresa” que los empresarios le dieron a los trabajadores sencillamente porque un buen día les llegó al pincho seguir explotando a los cholos, como hasta la víspera lo venían haciendo.

Podría seguir regando sobre mojado, porque este sanamabich tiene abundante de donde cortar……

Fausto

Anónimo dijo...

Como desafortunadamente lo conozco personalmente, llama la atención la foto "suya" que el director de Correo coloca en la parte superior de sus artículos.

Se trata de una diapositiva que muestra a un joven de tez rosada y cabello rubio.

A simple vista parece la foto de Raúl Tola tomada de arriba hacia abajo.

Pero como todos los televidentes no dejaran mentir, Aldo Mariategui es de tez trigueña, nariz grande tipo árabe o de Castrovirreyna, es bembón, semi calvo de cabello oscuro y, en his own chart: “de mala presencia” = look atrocious..!

- Señor Wiener usted no se ha preguntado ¿por qué Aldo M pone sobre sus artículos una foto que no es suya..?

¿Son complejos raciales que lo atormentan o él mismo no soporta verse..?

Compare y muérase de la risa ja, ja, ja, ja…..

Aquí Aldo "gringo"

http://www.correoperu.com.pe/correo/image_cache/x80-images-redactores-mariateguilacolumnadeldirectoraldo.gif


Y ahora el original con mote incluído:


http://lastdaysoftheincas.com/wordpress/wp-content/uploads/2009/09/aldo-mariategui.jpg

Patty Bustamante

Juan A. Cavero G. dijo...

Con Aldo eMe sucede lo mismo que con Clemente Palma, hijo del tradicionista, que se avergonzaba de sus ancestros negros. Al de nombre corto, y apellido demasiado grande, le avergüenza ser bisnieto de india.